VÉLEZ-RUBIO.- El alcalde de Vélez-Rubio (Almería), Miguel Martínez-Carlón, ha expresado su entusiasmo ante la posibilidad de que el cardenal Cristóbal López Romero sea elegido como Papa, afirmando que esto sería «un orgullo para el pueblo» y representaría «un fuerte impulso no solo espiritual, sino también turístico y cultural» para la localidad.
En declaraciones recientes, Martínez-Carlón comparó la elección del cardenal con «tocar la lotería», destacando la conexión personal que López Romero mantiene con el municipio. «Viene de vez en cuando y tiene una relación estrecha con la gente de aquí. Conoce a mi familia y yo a la suya; es muy agradable y cariñoso», comentó el alcalde.
Un vínculo profundo con sus raíces
El regidor ha subrayado que, a pesar de que López Romero se crió en Barcelona, «siempre menciona a Vélez-Rubio» como su lugar de origen. «Siente nostalgia por su pueblo y regresa siempre que puede. Aquí tiene varios primos y mantiene vivas sus raíces familiares», añadió.
Martínez-Carlón recordó que en la última visita del cardenal, este participó en un acto donde recibió la medalla de oro del Ayuntamiento y en la presentación de un apunte biográfico sobre su vida. Además, ha estado presente en celebraciones relacionadas con la Virgen del Saliente, a la que profesa una gran devoción, así como en la inauguración de una casa de hermandad.
Expectativas en el cónclave
El alcalde ha resaltado el carácter «llano y entrañable» del cardenal, quien ha demostrado un profundo amor por Vélez-Rubio a lo largo de su vida. «En el municipio seguimos con atención el desarrollo del cónclave, y muchos vecinos comparten la esperanza de que su nombre figure entre los papables. Puede ser que salga la fumata blanca y, de repente, sea él», afirmó Martínez-Carlón.
El cardenal López Romero, nacido en 1952, ingresó en 1964 en la familia religiosa fundada por Juan Bosco, emitiendo sus primeros votos en 1968 y sus votos solemnes en 1974. Tras completar su formación en el seminario salesiano de Barcelona, obtuvo una licenciatura en Ciencias de la Información en la Universidad Autónoma de Barcelona en 1982.
Ordenado sacerdote en 1979, comenzó su ministerio en el barrio de La Verneda, en Barcelona, y luego se trasladó a Paraguay, donde trabajó en la pastoral juvenil. Posteriormente, ocupó diversos cargos en la comunidad salesiana en Paraguay y en Marruecos, antes de regresar a España como superior de la provincia salesiana de María Auxiliadora.
En 2017, fue nombrado arzobispo de Rabat por el Papa Francisco, sucediendo al cardenal Vincent Landel. Su ordenación episcopal tuvo lugar en 2018 en la Catedral de San Pedro de Rabat, con el lema «Adveniat regnum Tuum», que eligió para su ministerio al servicio de la minoría católica.