
EL EJIDO.- El Pleno del Ayuntamiento de El Ejido ha dado su aprobación unánime esta mañana al pliego para la contratación de los servicios de temporada de playas, que se extenderán desde el periodo estival de 2025 hasta 2028.
Mejoras en la gestión de las playas
La concejala de Turismo, María Herminia Padial, ha destacado que “con esta iniciativa garantizamos que los servicios de temporada se ofrezcan en condiciones óptimas, mejorando la organización, asegurando la seguridad de los usuarios y promoviendo la sostenibilidad en la gestión del litoral”. Además, ha subrayado el avance hacia un modelo de chiringuito más ordenado, que incluirá una propuesta gastronómica bien estructurada y una estética que armonice con el paisaje costero.
Padial ha argumentado que “El Ejido cuenta con 27 kilómetros de costa y continuamos apostando por mejorar nuestras playas para que sean un referente en calidad y comodidad”. Este verano, se volverá a habilitar la Playa Canina, situada en la playa de Las Cuevecillas, ofreciendo una opción más para quienes deseen disfrutar del mar junto a sus mascotas. Asimismo, se reforzará la seguridad mediante nuevas infraestructuras, como la instalación de una torre de vigilancia en la playa de San Miguel, y se ampliará la accesibilidad con la creación de una zona de baño adaptado.
Compromiso con la calidad y la sostenibilidad
“Todo este esfuerzo responde al compromiso claro de ofrecer playas seguras, accesibles y de calidad, con servicios mejorados y en constante evolución”, ha afirmado Padial. En este sentido, el municipio cuenta con distintivos como las Banderas Azules, la Q de Calidad, Banderas Ecoplayas y el reconocimiento SICTED, que avalan el trabajo realizado para convertir el litoral en un atractivo turístico de primer nivel. Estas mejoras beneficiarán tanto a los visitantes como a los residentes que disfrutan de las playas durante todo el año.
El pliego establece un marco claro para la adjudicación y explotación de estos servicios, asegurando que su funcionamiento contribuya a mejorar la experiencia de vecinos y visitantes, con una oferta más cuidada, mejor organizada y en armonía con el entorno. La temporada de explotación de estos servicios abarcará desde el 11 de abril (Viernes de Dolores) hasta el 1 de noviembre (Día de Todos los Santos), salvo que la Junta de Andalucía establezca otra condición en su autorización.
Detalles de la licitación y requisitos
Las zonas de explotación están detalladas en el Plan de Playas y se organizan en distintos lotes. Estos incluyen:
- Lote A: Quioscos de helados: 2 en Balerma y 1 en Almerimar.
- Lote B: Parcelas de hamacas y sombrillas.
- Lote C: Parcelas náuticas.
- Lote D: Chiringuitos: 2 en Balerma.
- Lote E: Conjuntos de chiringuito con hamacas y sombrillas: 7 en Almerimar.
Cada licitador podrá optar a un único lote, lo que garantiza una competencia equitativa y evita la concentración de concesiones en pocas manos. Cada servicio de temporada tiene un canon anual establecido, que incluye la repercusión de los servicios prestados por el Ayuntamiento en la playa: Quioscos de helados: 600 €; Parcelas de hamacas y sombrillas: 1.300 €; Parcelas náuticas: 1.000 €; Chiringuitos: 3.500 €; y Chiringuitos + Hamacas y sombrillas: 4.500 €.
Según lo estipulado en el pliego, todas las instalaciones deberán ser prefabricadas y desmontables, quedando prohibidas las estructuras fijas. Además, se prohíbe el estacionamiento y la circulación de vehículos en la playa, así como la publicidad exterior, salvo los rótulos identificativos del establecimiento. Se garantizarán sistemas adecuados de saneamiento y eliminación de residuos, siendo los adjudicatarios responsables del mantenimiento, la higiene y la seguridad de sus instalaciones.
En lo que respecta a los chiringuitos, uno de los aspectos clave ha sido la mejora de la oferta gastronómica y la estética, que deberán incluir cocina y ofrecer una selección de comidas calientes. Se priorizará una propuesta basada en ingredientes frescos y elaboraciones cuidadas, con una presentación atractiva y un servicio ágil. Además, se fomentará la inclusión de opciones adaptadas a distintas necesidades alimentarias, como alergias, intolerancias o dietas veganas y vegetarianas, garantizando así una oferta variada y accesible para todos los usuarios.
Se ha definido un modelo unificado de chiringuito prefabricado y desmontable, con una superficie cerrada de 20 m² y una terraza con pérgola de 50 m². La imagen del establecimiento deberá mantener coherencia con el entorno marítimo, estableciendo requisitos sobre el diseño, los materiales y la decoración. Se prestará especial atención al mobiliario, que deberá ser duradero, resistente y de materiales adecuados, prohibiéndose el uso de mobiliario con publicidad corporativa ajena al establecimiento.
El Ayuntamiento llevará a cabo inspecciones periódicas para verificar que los adjudicatarios cumplen con sus obligaciones en cuanto a limpieza, seguridad y prestación del servicio. También se realizarán controles sanitarios y de calidad en los chiringuitos para asegurar que los alimentos se manipulen correctamente y que las instalaciones se mantengan en buen estado.