
ALMONTE (HUELVA), 4 – El PSOE de Almonte ha expresado su descontento ante la decisión del alcalde, Francisco Bella, de no reducir los impuestos municipales, los cuales han ido en aumento desde su llegada al cargo. A pesar de que el alcalde ha afirmado haber saneado las finanzas del Ayuntamiento, los socialistas consideran que esta medida agravia a los ciudadanos de Almonte.
Desde las filas del PSOE, se ha criticado la votación del equipo de Gobierno, que este jueves se opuso a una moción presentada por el partido socialista que solicitaba la disminución de las tasas municipales. Según el equipo de Gobierno, este esfuerzo no sería necesario, lo que ha generado un fuerte rechazo entre los socialistas.
Reacciones del PSOE ante la negativa del alcalde
Los representantes del PSOE han señalado que lo ocurrido en el Pleno evidencia que la supuesta recuperación económica anunciada por el alcalde no es más que una ilusión. Aseguran que la administración ha optado por reducir el tiempo de pago a proveedores mediante un crédito de cinco millones de euros del Estado, lo que, según ellos, no refleja una verdadera mejora en la situación financiera del Ayuntamiento.
Además, han subrayado que, si realmente se ha logrado una recuperación económica, sería justo que se comenzara a reducir la carga fiscal sobre los ciudadanos. «Si los números son tan positivos como nos cuentan, se debería comenzar a aflojar la presión fiscal sobre los ciudadanos y ciudadanas, como una cuestión de justicia», han afirmado. Sin embargo, lamentan que el alcalde se haya negado rotundamente a bajar los impuestos, lo que consideran un agravio para los almonteños.
Propuestas del PSOE y respuesta del equipo de Gobierno
En otra moción, el PSOE propuso la creación de una Sala de Estudio, la cual también fue rechazada por el equipo de Gobierno. El alcalde argumentó que «la van a hacer», lo que los socialistas interpretan como un intento de desestimar una iniciativa que surgió de su partido. Esta situación ha llevado a los socialistas a manifestar que estarán «muy vigilantes» para asegurar que esta promesa se cumpla y no se convierta en un nuevo incumplimiento por parte del alcalde y su equipo.
La situación en Almonte refleja un claro desacuerdo entre el equipo de Gobierno y la oposición, donde las decisiones tomadas por el alcalde han generado un clima de tensión y descontento entre los ciudadanos. La falta de reducción de impuestos y el rechazo a propuestas que beneficiarían a la comunidad son temas que seguirán siendo objeto de debate en el futuro.