Layla Dris Hach-Mohamed: Una Nueva Era en la Comisaría de Jaén
Hace tres décadas, Layla Dris Hach-Mohamed, una jiennense adoptiva, se encontraba de la mano de su hermana pequeña, sin imaginar que una simple ocurrencia de juventud se convertiría en una premonición que marcaría su vida. En su búsqueda de unas oposiciones, encontró su verdadero destino, desarrollando con el tiempo una vocación de servicio público que se mantiene intacta hasta hoy. Su trayectoria la ha llevado a convertirse en la cuarta mujer en España en asumir el cargo de directora en una Comisaría de la Policía Nacional.
El Salón del Trono de la Subdelegación del Gobierno fue el escenario de una emotiva toma de posesión, donde el delegado del Gobierno de España en Andalucía, Pedro Fernández, y el jefe superior de la Policía Nacional en Andalucía Oriental, Luis Jesús Esteban Lezáun, presidieron el acto. La sala, repleta de autoridades y representantes de la sociedad jiennense, fue testigo del respaldo a una agente policial con una trayectoria impecable.
Trayectoria Profesional y Reconocimientos
Originaria de Melilla y agente desde 1995, Layla llegó a Jaén hace tres años como responsable de la Unidad de Coordinación de Operaciones. Anteriormente, ocupó el cargo de jefa de la Comisaría local de Andújar durante un breve período, además de haber liderado la comisaría del Zaidín en Granada y formar parte de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado en Canarias. Su formación excepcional y habilidades innatas la llevaron a ser nombrada jefa del contingente español en la misión de paz de las Naciones Unidas en Haití, así como agregada de Interior en la Embajada de España en Rabat, labor por la que recibió la encomienda al mérito civil del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Recientemente, Layla juró su nuevo cargo ante la Constitución Española, un momento que fue presenciado por todos los invitados, quienes se pusieron de pie en señal de respeto. Durante su intervención, recordó aquel “lejano” momento que cambió su vida, gracias a su hermana, a quien no dejaba de mirar de reojo. Este fue el inicio de su formación académica en uno de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado más valorados en España.
Compromiso con la Seguridad y la Comunidad
“En Ávila, en 1995, me formé técnicamente y aprendí el significado de ser policía, que no es solo velar por el cumplimiento de la Ley, sino estar al servicio de las personas. Es quien lleva de la mano en momentos de desesperación, quien consuela con palabras en los instantes más oscuros y un defensor de los derechos fundamentales. Esa lección que aprendí ha sido la luz de mi camino”, enfatizó Layla durante su discurso.
Con un firme compromiso por convertir a los agentes en una garantía de bienestar, Layla destacó que “la labor policial enfrenta constantes desafíos, siendo uno de los más importantes la seguridad en sus dos vertientes, objetiva y subjetiva”. Aseguró que ambas se han alineado en la provincia, respaldadas por los resultados y la excelente labor de su antecesor, lo que ha permitido que la sociedad jaenera se sienta segura, un aspecto que le enorgullece. Además, subrayó la importancia del principio de autoridad y se dirigió a los ciudadanos: “Ustedes serán y son el centro de nuestra labor”. Con un mensaje claro, agregó: “Estoy aquí para servirles con cercanía, empatía y un profundo respeto”.