CÁRTAMA (MÁLAGA), 17
La vicepresidenta primera del Gobierno y precandidata a la Secretaría General del PSOE-A, María Jesús Montero, ha llevado a cabo este viernes por la tarde su último acto de recogida de avales para postularse como líder de la federación socialista andaluza. Durante el evento, Montero anunció que comienza la «cuenta atrás» para que el PSOE-A recupere el poder en las próximas elecciones autonómicas y para que el presidente de la Junta, Juanma Moreno (PP-A), «deje San Telmo», en alusión al palacio de Sevilla que alberga la sede de la Presidencia del Gobierno andaluz.
El acto se celebró en Cártama, un municipio malagueño gobernado por el socialista Jorge Gallardo, quien fue elegido recientemente como vocal de la Comisión Ejecutiva Federal del partido en el Congreso celebrado en Sevilla. En presencia de destacados miembros del PSOE, como el secretario general del PSOE de Málaga, Daniel Pérez, y los exconsejeros socialistas andaluces Magdalena Álvarez y Luciano Alonso, Montero expresó su satisfacción por llevar a cabo su «último acto de recogida de avales» en este municipio, ya que el plazo para presentar candidaturas finaliza el sábado, 18 de enero.
Un proceso de renovación positivo
María Jesús Montero defendió que el proceso de renovación del liderazgo del PSOE andaluz, actualmente bajo la dirección de Juan Espadas, está siendo «bonito». Reivindicó la labor histórica del PSOE en Andalucía, destacando su compromiso para ofrecer a los andaluces «mejores oportunidades» y luchar contra la desigualdad, así como garantizar «servicios públicos de calidad». En este sentido, enfatizó que el PSOE ha promovido una Andalucía que «pelea por tener las mismas capacidades que otros territorios de España», en lugar de una comunidad que se conforma o confronta constantemente.
La precandidata socialista también subrayó su deseo de construir un PSOE «fuerte, unido y cohesionado», que se enfoque en brindar oportunidades a todos los ciudadanos de Andalucía. Montero hizo hincapié en que «ese proyecto es colectivo o no será», reafirmando su compromiso con la comunidad andaluza. Además, recordó que, aunque dejó el Gobierno andaluz para asumir el cargo de ministra, siempre ha estado atenta a los intereses de Andalucía.
Críticas a la gestión del PP en Andalucía
Durante su intervención, Montero aprovechó para resaltar la acción del Gobierno de Pedro Sánchez en Andalucía, destacando una «apuesta sin precedentes» que ha permitido atraer empresas a todas las provincias de la comunidad. Contrapuso esta labor con la gestión del PP, que ha llevado al «deterioro de servicios públicos» como la sanidad, que era un orgullo para Andalucía durante el mandato socialista.
La vicepresidenta también afirmó que en el PP «están nerviosos» ante su candidatura, sugiriendo que esto se debe a que el PSOE avanza «con fuerza y con ilusión» hacia la recuperación de la Junta. Criticó al presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, al que acusó de implementar políticas de derecha que se asemejan cada vez más a la ultraderecha, comparándolo con otros líderes autonómicos del PP.
Un futuro esperanzador para Andalucía
Montero destacó que la Junta de Andalucía ha recibido «más dinero que nunca» del Gobierno de España, con un total de «53.800 millones de euros más en estos siete años de Pedro Sánchez». Sin embargo, criticó que Juanma Moreno continúe afirmando que el Gobierno central maltrata a Andalucía, argumentando que el problema radica en la mala gestión de los recursos por parte del líder del PP-A.
La precandidata socialista concluyó su intervención afirmando que el PSOE-A no permitirá el deterioro que ha sufrido Andalucía desde la llegada del PP al Gobierno. Afirmó que el Partido Socialista es «imbatible» cuando está fuerte, unido y concentrado, y que esto es lo que realmente les preocupa en el PP. Montero se mostró optimista sobre el futuro del PSOE-A, asegurando que con la colaboración de todos sus militantes, el partido tiene la capacidad de «volver a conquistar la esperanza» y mejorar la vida de los andaluces.
Finalmente, María Jesús Montero proclamó que su candidatura busca «ganar» y que «Andalucía lo merece», cerrando su discurso con un mensaje de unidad y determinación para el futuro del PSOE en la comunidad.