La Comunidad de Propietarios de Roche ha solicitado al Ayuntamiento de Conil la expropiación de la parcela donde se ubica la actual depuradora. Esta medida busca garantizar su inclusión en el proyecto de la futura Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Conil. Según Pablo Fernández, presidente de la comunidad, «la Junta de Andalucía no podrá invertir en la construcción del colector que conectará Roche con la nueva depuradora si el terreno sigue siendo de propiedad privada». Más de cincuenta vecinos se congregaron en el Centro de Servicios Sociales durante el Pleno Municipal para manifestar su preocupación.
«Estamos exigiendo que se cumpla con la obligación de ejercer una competencia pública», declaró Fernández, quien también denunció que el colector actual, una infraestructura esencial para la zona, está siendo gestionado de manera irregular por la comunidad de propietarios. Esta situación, según el presidente, pone en riesgo la viabilidad del proyecto y la calidad de vida de los residentes.
Una infraestructura al borde del colapso
Los vecinos de Roche han expresado su preocupación por el estado de la actual depuradora, que fue diseñada para atender a unas 900 viviendas, pero que actualmente soporta la carga de más de 13.000 personas durante los meses de verano. «La depuradora está completamente colapsada», advierten, señalando que el crecimiento urbanístico, que incluye la construcción de un hotel, ha sobrepasado la capacidad de la infraestructura.
Los manifestantes portaban pancartas con mensajes como «¡¡E.D.A.R YA!! Roche es Conil», destacando la urgencia de la situación. Según Fernández, «si el Ayuntamiento no cumple con su obligación de expropiar el terreno, los fondos destinados al proyecto podrían perderse», dejando a Roche fuera de la nueva EDAR. La comunidad también ha alertado sobre las graves consecuencias medioambientales y de salud pública que podría acarrear la falta de una solución adecuada.
Denuncias y acciones legales
Ante la falta de avances, la Comunidad de Propietarios ha llevado el caso al Defensor del Pueblo y a la Unión Europea, además de presentar tres demandas contencioso-administrativas. «Solo pedimos que se cumpla con la normativa, que se expropie el terreno y que se construya un colector acorde a los estándares exigidos», explicó Fernández.
El deterioro de la depuradora ya no solo genera molestias por el hedor, sino que también plantea riesgos de contaminación grave para el litoral de Conil y sus alrededores. «Estamos ante una situación límite que podría derivar en problemas graves para la salud pública y el medio ambiente», advirtió el presidente de la comunidad. Aunque los vecinos se muestran optimistas respecto al apoyo de la corporación municipal, critican la falta de diálogo por parte de la alcaldesa, Inmaculada Sánchez.
Respuesta del Ayuntamiento
En el último Pleno Ordinario, la alcaldesa de Conil aseguró que «la intención ha sido, es y será que Roche no se quede fuera» del proyecto de la nueva EDAR. Sánchez afirmó que los trámites de expropiación ya están en marcha y que está prevista una reunión entre técnicos municipales y de la Junta de Andalucía para abordar este tema. Sin embargo, también expresó su incomprensión ante las acciones legales emprendidas por los vecinos.
Mientras tanto, la comunidad de Roche sigue exigiendo soluciones concretas y urgentes. «No podemos permitir que esta situación se prolongue más», concluyen los vecinos, quienes insisten en la necesidad de garantizar una infraestructura moderna y eficiente que cumpla con los estándares de calidad exigidos por las administraciones públicas.