
SEVILLA, 3 – El secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), Cristóbal Cano, ha manifestado su intención de «explorar nuevas vías comerciales» en busca de «aliados más fiables» tras la imposición de aranceles por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que afectarán con un 20% a todos los productos provenientes de la Unión Europea (UE) a partir del 9 de abril.
En declaraciones a la cadena Ser, Cano ha subrayado que «una traba comercial no es nunca una buena noticia». Sin embargo, ha valorado que, tras el anuncio de Trump, «al menos ya tenemos la certeza de la realidad a la que nos enfrentamos», lo cual contrasta con la incertidumbre que había prevalecido y que había generado movimientos desfavorables en los mercados.
La nueva realidad comercial
Cano ha indicado que ahora se enfrentan a esta nueva situación con la convicción de que Estados Unidos ha dejado de ser un socio fiable a corto y medio plazo. Ha advertido que productos como el aceite de oliva no pueden «descuidar un mercado como el americano a pesar de estas trabas comerciales, ya que es el principal destino de nuestro aceite de oliva envasado».
El líder de UPA ha destacado que los aranceles anunciados por Trump no contemplan una «segmentación por países», lo que implica que «al final en la UE todos vamos a jugar con las mismas cartas». Esto genera expectativas sobre qué aranceles se aplicarán a otros países fuera de la UE, como Túnez, Turquía o Marruecos.
Oportunidades en nuevos mercados
Desde su perspectiva, tanto la UE como España deben «trabajar en nuevos mercados con valor», como el Mercosur, que debe ser considerado «realmente como una oportunidad», así como en países como India, Australia o China, que pueden ofrecer salidas a producciones que son «seguras, sostenibles, a precios competitivos y muy diversas».
El secretario general de UPA ha expresado su deseo de conocer «la hoja de ruta» que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, definirá para enfrentar los aranceles de Estados Unidos, con un «apoyo decidido a un sector estratégico como el agroalimentario». Además, ha defendido que «la Junta de Andalucía también debe presentar medidas compensatorias» para mitigar el impacto de estas decisiones comerciales.