HUELVA, 20
El grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Huelva ha solicitado este jueves al equipo de Gobierno local la implementación de medidas específicas para abordar el creciente problema del vandalismo y los intentos de robo que han afectado recientemente a los comercios y establecimientos del centro de la capital. Entre las propuestas destacadas se encuentran el incremento de la iluminación y el aumento del número de patrullas de la Policía Local.
Según el portavoz municipal, Wenceslao Font, en los últimos meses Huelva ha experimentado un alarmante aumento de la criminalidad y de la sensación de inseguridad, lo que ha generado una creciente preocupación tanto entre los ciudadanos como entre los comerciantes de la zona. Font ha señalado que los actos de violencia, los robos y el vandalismo se están extendiendo por diversas áreas de la ciudad, afectando no solo la seguridad de los vecinos, sino también la estabilidad económica de los negocios locales.
Aumento de la Inseguridad en Huelva
En su declaración, Font hizo referencia a varios incidentes recientes que han contribuido a la alarma social en la ciudad. Ejemplos como el apuñalamiento de un joven de 19 años en la Plaza Houston, el asesinato y los tiroteos en la barriada del Torrejón, así como el incremento de la inseguridad en barrios como Pérez Cubillas, Pescadería, San Antonio y La Merced, han generado una preocupación creciente entre los vecinos y comerciantes.
El concejal de Vox ha advertido que la delincuencia y el vandalismo han comenzado a extenderse también a los negocios del centro de Huelva, lo que podría estar relacionado con la reducción del tráfico debido a la peatonalización de algunas calles. Este fenómeno ha llevado a que lugares tradicionalmente considerados seguros, como La Grosera, hayan registrado intentos de robo en establecimientos como el salón de uñas Nails y la bodega Madreana, entre otros.
Impacto Económico en los Comerciantes
Wenceslao Font ha enfatizado que estos actos delictivos no solo causan daños materiales, sino que también tienen un impacto directo en la economía local. Los comerciantes, que ya enfrentan una situación económica complicada, se ven obligados a lidiar con los destrozos y robos que afectan sus establecimientos. Esta situación no solo amenaza la infraestructura de los negocios, sino que también pone en riesgo la estabilidad económica de aquellos que dependen de su actividad comercial para subsistir.
Los comerciantes que luchan día a día por mantener sus negocios abiertos ahora deben hacer frente a una nueva realidad marcada por la inseguridad. La presión adicional que supone lidiar con el vandalismo y los robos puede resultar devastadora para aquellos que ya enfrentan desafíos económicos significativos.